jueves, 1 de octubre de 2009

La Lucha entre Edom e Israel

En el mensaje de los profetas, Cristo está siempre presente. Regularmente se piensa que el mensaje de Cristo solamente está registrado en los evangelios sinópticos y en todo el nuevo testamento; sin embargo, en los mensajes de los profetas también está presente Cristo.
Mucho se habla de Jacob (Israel) y las 12 tribus, y muy poco se habla de Edom o Esaú, ambos eran hermanos, Edom es el claro tipo de enemigo de aquel que pertenece al pueblo de Dios, Edom representa al mundo, sin embargo el pueblo de Dios tiene el triunfo en Cristo, por su muerte resurrección y ascensión. Israel representa al pueblo de Dios.
La profecía de Abdías nos habla del conflicto entre Jacob y Esaú, dos pueblos que desde el vientre de su madre peleaban, la profecía de Jehová sobre Sara fue que dos pueblos serían divididos desde antes de nacer.
La historia nos cuenta que cuando los Israelitas iban de paso a la tierra prometida Números 20.18, los Edomitas no les permitieron el paso por su tierra e Israel tuvo que rodear la tierra de Edom.
El pecado de Edom fue haber guardado el enojo contra su hermano Abdías 1.4, La biblia nos enseña que el enojo y el rencor no son buenos delante de Dios, airaos pero no pequéis, no se ponga el sol sobre vuestro enojo, a través de su palabra Dios nos invita a que estemos bien con nuestros hermanos, Amar es el mandamiento, el amor y la misericordia es la acción y obediencia al mandamiento.
En Abdías Dios trata con el orgullosos Esaú, anunciándole su destrucción, el castigo inevitable para Edom y la restauración de la nación de Israel.
El nombre de Abdías significa adorador de Jehová. El profeta era piadoso, patriota, y de naturaleza espiritual, muy sensible y además residía en Judá.
Los Versículos 11-14 narran una invasión de las 4 que ocurrieron y destruyeron Jerusalem, normalmente se atribuye esta narración a la que tuvo lugar por parte de Sedecías aproximadamente en el año 583 A. C. no es muy seguro pero es muy probable. El libro de Abdías resume proféticamente la lucha y el odio que tendrá lugar entre los hijos de Dios y el mundo, culmina animando a los hijos de Dios con el triunfo de Cristo.
Humillando al orgulloso versículo 1 Oído hemos el pregón de Judá (Esta a cuentas Edom) todas las naciones son llamadas a levantarse contra Edom. Una de las características del pecado es el orgullo, Edom pese a ser tan pequeño existía un orgullo muy grande en el. Dios siempre nos dice lo que somos, el orgullo de Edom se debió a lo inexpugnable de su territorio versículos 3 y 4, sus sabios y violentos hombres son la segunda causa de su soberbia y por ende de su pecado.
Este orgullo de Edom, es una figura del orgullo del hijo de perdición, el futuro anticristo. La esencia del pecado es el orgullo, pero los orgullosos serán abatidos Daniel 5.20, Jeremías 50.
Los versículos 10 al 14 nos hablan de cómo fue humillado su hermano se conocen como los lamentos de Abdías y concluye con las bendiciones para Israel.
Edom se había posesionado de una parte de Judá, esto fue corroborado al regreso de la cautividad, esta región fue conocida desde entonces como Idumea y es de donde sale la dinastía de Herodes, enemigos de Cristo. Salmo 38.4
Abdías también relaciona la profecía. Le quitaran la túnica (se la quitaron) su única posesión terrenal (del Señor Jesús), fue burlado el día de su quebrantamiento. Edom fue el traidor en tiempos de su necesidad. Tampoco habías de haber entregado en el día de la angustia.
Dios quiere que como hermanos nos amemos, que exista amor entre nosotros y que obedezcamos el mandato de amar a nuestros semejantes como a nosotros mismos.
El castigo que Jehová ha preparado para Edom (el mundo) es terrible, es imposible de soportar el día de la ira del Señor, es mejor amarnos, amémonos de corazón.

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